¿Por qué hablamos del lomo ibérico en particular?
Pues porque, aunque solemos pensar erróneamente que todo va a la nevera, lo cierto es que NO todos los embutidos son iguales. Y, precisamente, el lomo ibérico tiene sus propias particularidades.
Para disfrutarlo en su punto perfecto y mantener su sabor, es fundamental saber conservarlo adecuadamente y, en este artículo, te lo voy a explicar paso a paso.
Factores clave para una correcta conservación del lomo ibérico
Un error común es guardarlo en la nevera, pero esto puede afectar gravemente su sabor y textura. Al hacerlo, el salitre tiende a salir hacia la superficie, lo que cambia el aroma, el gusto y la experiencia general.
En cambio, lo mejor es guardarlo en un lugar fresco y seco, lejos de la luz directa.
Conservar el lomo ibérico en perfecto estado requiere prestar atención a varios factores específicos que marcarán la diferencia en su sabor y textura:
- Temperatura ambiente adecuada: Lo ideal es mantener el lomo en un ambiente entre 15ºC y 20ºC. Esto permite que conserve su jugosidad sin que se reseque ni aparezcan cristales de sal en la superficie.
- Humedad controlada: El lugar donde guardes el lomo debe tener una humedad relativa baja, alrededor del 60-70%. Esto evitará que la pieza pierda agua rápidamente y se endurezca, o que se produzcan hongos en su superficie.
- Ventilación: Un espacio bien ventilado es esencial para que el lomo respire, manteniendo su frescura y evitando que se acumule humedad.
- Evitar la luz directa: La luz solar o cualquier fuente de luz directa puede alterar la calidad del lomo, haciendo que se oxide o cambie su color y sabor. Siempre guárdalo en un lugar oscuro o con poca luz.
Un buen ejemplo sería una despensa fresca o un armario en una zona ventilada de la casa, como una bodega o sótano.
Métodos recomendados para conservar el lomo ibérico en casa
La clave está en la simplicidad y el cuidado. Para conservar tu lomo ibérico de la mejor manera en casa, te recomendamos:
- Lugar fresco y seco: Como hemos mencionado, evita la nevera y busca un rincón fresco de la casa. Un armario oscuro o una despensa puede ser perfecto.
- Envuelto en papel encerado o film: Si el lomo está sin abrir, puedes mantenerlo en su envase original. Pero una vez abierto, lo ideal es envolverlo en film transparente. Esto crea una barrera que protege al lomo de la exposición al aire y evita que se reseque.
- Corta solo lo que vayas a consumir: Así aseguras que cada rebanada tenga la mejor frescura posible, además de evitar que el resto del lomo se reseque.
Cómo almacenar el lomo ibérico una vez abierto
Una vez abierto, lo mejor es envolverlo en film transparente en lugar de volver a meterlo en su envase original. Esto se debe a que el film se adhiere mejor a la pieza, preservando su humedad natural y protegiéndolo del aire. Si prefieres algo más natural, un paño de algodón también puede funcionar, pero asegúrate de que esté bien limpio.
Si el lomo ya está cortado en lonchas, lo recomendable es separar las lonchas con papel de horno o film para que no se peguen entre sí y luego envolverlas en papel film. Siempre es mejor consumirlo cuanto antes para disfrutar de todo su sabor.
Conservación del lomo ibérico en diferentes estaciones del año
El clima tiene un papel importante en la conservación del lomo ibérico, y los cuidados varían según la estación.
En verano, con las altas temperaturas, es vital encontrar ese lugar fresco y seco para evitar que el lomo se estropee. Si vives en una zona muy calurosa y no tienes acceso a una despensa fresca, podrías considerar conservarlo en la nevera, pero solo en casos extremos. Eso sí, nunca lo metas directamente en la nevera sin protegerlo adecuadamente con film o papel encerado.
En invierno, el lomo es mucho más fácil de conservar, ya que el ambiente suele ser más fresco. Un armario de cocina o una despensa bien ventilada debería ser suficiente para mantenerlo en perfecto estado.
Errores comunes al conservar lomo ibérico y cómo evitarlos
- Guardar en la nevera: Como hemos dicho, el lomo no se lleva bien con la nevera. A menos que no tengas otra opción en verano, busca siempre un lugar fresco y seco.
- No envolverlo en film: Meterlo en su propio envase una vez abierto puede hacer que se reseque y pierda su textura característica. Siempre envuélvelo en film transparente para evitar que le entre aire.
- No cortar lo suficiente: Al cortar una porción diaria, el lomo se mantendrá fresco y evitarás que el resto se oxide o se seque.
Y eso es todo por ahora. Si no lo he dejado del todo claro, siempre puedes escribir tus dudas en los comentarios, un poco más abajo :)
Además, si tienes dudas en cuanto a otros embutidos, te dejo nuestro post genérico sobre la conservación de embutidos ibéricos.
Recuerda, cuida de tu lomo ibérico y, ¡lo disfrutaras el doble!